¿Buenas noticias del Plan de la Minería?
Teruel Existe de Alcorisa

En las últimas semanas el Programa de Desarrollo Alternativo de las Zonas Mineras del Carbón, cada vez más conocido popularmente como Plan MINER ha dado bastantes noticias, algunas buenas, pero otras excesivamente optimistas según creemos en Teruel Existe.

Según los datos que aportó el lunes 27 de Enero Juan Miguel Benítez, gerente del Instituto Para La Reestructuración De La Minería Del Carbón Y Desarrollo Alternativo De Las Comarcas Mineras, este plan destinó, hasta final del 2002, 212 millones de euros para 227 proyectos de infraestructuras (ejecutado el 60%), y 30 millones de euros para 51 proyectos empresariales, los cuales han supuesto, según dijo, la creación de un total de 908 empleos, lo que supondría haber repuesto ya el empleo destruido en las cuencas mineras.

Rápidamente respondieron los sindicatos que esos datos oficiales distaban mucho de acercarse a la realidad: en la valoración de los sindicatos, el empleo destruido en las comarcas mineras es de 2500 empleos, y la creación de empleo nuevo no alcanza más de 600 puestos de trabajo.

La exposición de Teruel Existe en la Casa de Cultura le da un nuevo aspecto al edificio.

Nosotros estamos mucho más cerca de creernos los datos de los sindicatos que los del ministerio, por varias razones: porque vivimos en la zona afectada, porque sabemos prácticamente de cada una de las empresas que han recibido las ayudas empresariales de este Plan, y porque hemos visto los múltiples defectos que están lastrando la eficacia de este programa

Este programa ha estado lastrado de grandes retrasos desde su inicio, retrasos que fueron un auténtico parón en los años 2000, 2001 y parte del 2002. En el año pasado se ha corregido en parte la lentitud e inoperancia anterior, pero aún así los últimos 36 proyectos de infraestructuras correspondientes al 2002 , por valor de 31,77 millones de euros (5.286 millones de pesetas) no fueron aprobados por el ministerio de economía hasta el mes de diciembre de este año pasado. En el momento presente parece que la voluntad de todos es corregir este retraso, de manera que a los pocos días de esta aprobación la Mesa de la Minería aprobó proponer al ministerio 30 nuevos proyectos por valor de 72 millones de euros (casi 12.000 millones de pta.), y el ministerio a su vez, dentro de esta nueva dinámica, ha respondido rápidamente publicando en el BOE el pasado 8 de enero la convocatoria de ayudas a proyectos empresariales generadores de empleo que promuevan el desarrollo alternativo de las zonas mineras, por la que se pretende directamente generar empleo apoyando a las empresas para ello.

Nos felicitamos de que el ministerio haya decidido publicar esta convocatoria de ayudas en su momento, pues hasta ahora no había habido sino grandes retrasos: la convocatoria de ayudas empresariales de 2001 no fue publicada hasta el 15 de Enero de 2002, y la ahora convocada es la de 2003, por lo tanto la convocatoria propia de 2002 ni ha sido convocada: se la han saltado.

No es cierto que en las comarcas mineras se haya logrado reponer ya el empleo, se está muy lejos aún de conseguir eso. Y por supuesto, el empleo que se genera no tiene ni de lejos la calidad que tenía el que se perdió. Un empleo en la minería sostenía una familia entera con altos niveles de renta y de estabilidad, pero los empleos que se generan ahora, en consonancia con las circunstancias del mercado de trabajo, son de bajos niveles salariales y escasa seguridad. No vamos a pedir que se genere empleo en circunstancias distintas de las del mercado, pero no cabe no obstante ser tan optimista hablando de haber superado una situación anterior.

Para alcanzar los niveles de renta y seguridad que aportaba a una familia el empleo que se destruyó, son hoy necesarios en una familia similar dos puestos de trabajo. El tipo y calidad del empleo que se genera hoy hace que el empleo femenino sea más necesario, no ya, como sería idealmente, como un aspecto de la integración de la mujer en la vida laboral y social, sino como un componente necesario de la renta familiar y de la seguridad económica de las familias en una situación de empleo precario y salarios bajos. Para que las familias jóvenes puedan gozar de rentas y de estabilidad económica similares a las que proporcionaba la minería, y para asentar la población, mejorar la natalidad y dinamizar la vida y la economía local, es necesario crear empleo femenino, y esto no está ocurriendo hoy en día. El desempleo femenino en estas comarcas es muy elevado.

Creemos que es un error que este programa establezca una inversión mínima de 240.000 euros (40 millones de pesetas) para las empresas y de 120.000 euros (20 millones de pta.) de inversión mínima cuando se trate de trabajadores autónomos. ¿por qué se establecen estos límites tan altos de inversión mínima? Esto sitúa fuera del acceso a estas ayudas a la gran mayoría de las empresas de estas comarcas, que son pequeñas y medianas, y por supuesto a los autónomos. Se deja fuera del acceso a las ayudas a la mayor parte del tejido empresarial, justamente a la parte que tiene más capacidad de generar empleo ¿no sería en momento, en la fase avanzada de desarrollo del programa, de que se descendiera notablemente la cantidad de inversión mínima exigible para conceder ayudas? Estamos seguros de que de esta manera se optimizaría la cantidad de empleo creado por dinero invertido.

En efecto estamos viendo que se proponen y se canalizan muchas infraestructuras muy convenientes para financiarlas con el dinero de este plan ¿Hay alguna infraestructura que se esté abordando, en las comarcas mineras, con dinero de otro origen? Parece ser que no, todo lo que se hace aquí es financiado con este plan ¿Pero no habíamos quedado en que el Plan Miner viene a corregir una situación mediante la aportación de dinero extra? ¿qué significa esto, es que si no existiera este plan no se invertiría en nada, no se crearía infraestructura alguna en estas zonas? ¿cuánto supone este plan realmente de esfuerzo inversor añadido, destinado a corregir los efectos perversos del desmantelamiento de la minería del carbón?. Desde nuestro punto de vista sólo la parte añadida debería ser contabilizada. Nos gustaría conocer una valoración del plan hecha desde estos parámetros.

No nos importaría tanto que toda inversión en infraestructuras hecha en las comarcas mineras se haga con cargo al Plan Miner si esto sirviera para liberar fondos que destinar a otras zonas que no son beneficiarias del Plan. Puede parecer en primer término que la presencia de este programa en determinadas zonas supone una discriminación para las zonas que no disponen de él, todo lo contrario, este plan podría ser una oportunidad para que el dinero en inversiones que las administraciones deben destinar a esta provincia, fuera concentrado en atender las necesidades de las zonas de la provincia que no gozan de este programa, pero lejos de esto, la debilidad inversora en toda la provincia sigue siendo la regla. Contando con Plan Miner, con Plan Especial de Teruel, con Programas Urban, Equal, Leader , lo cierto es que esta provincia no obtiene lo necesario para corregir sus déficits históricos. Quizás sobran tantos nombres, y falta verdadera voluntad de apostar en serio por ella.

Aspecto de la exposición que se puede visitar en la Casa de Cultura hasta el 21 de febrero.